Estos niños son el mejor
ejemplo de lo que debe significar el deporte para ellos y la antítesis de lo
que pasa en el deporte de los “supuestos” países ricos.
Cuando hace mas de 30 años venían
atletas africanos a Europa, a correr Cross y maratones, descalzos, nos
sorprendieron, pero casi siempre ganaban, nos contaban historias difíciles de
niños que tenían que acudir a clase todos los días a varios kilómetros de sus
hogares, lo hacían corriendo y justificaba su gran nivel de entrenamiento.
Posteriormente se convirtieron en profesionales con representantes y en algunos
casos tocaron el mundo del dopaje.
Parece imposible que estos
niños representen a México, pero es cierto y evidencia que las Adidas y los
grandes equipajes no hacen al “monje” y en cuanto a las medias raciones, pensar
que serian capaces de conseguir con raciones completas.
No dejan de ser un ejemplo para
focalizar nuestro futuro, el futuro de un mundo que se tambalea.
Como
decía Koldo Sarachaga “Este país sería una bomba si hubiéramos focalizado bien
lo que queremos”