Hay a quienes, después de decir al público “no vayas”, les preocupa el cuantos había, tienen métodos de recuento y buscan la comparación con otras manifestaciones.
Pobre gente, si hay alguien sin futuro en este país, son precisamente ellos (1500 en Gasteiz no se indica el método de recuento).
Otros que no se caracterizan precisamente por su simpatía hacia los nacionalistas, valoran la presencia como significativa, aceptan las cifras de la policía municipal y muestran preocupación.
La manifestación y toda su fase previa, ha generado damnificados, quienes originan el problema estudiaran sus consecuencias, y.............. , ¿dictaran auto de procesamiento contra todos los presentes?, ¿continuaran con su desprestigio a nuestras instituciones?, ¿se disolverán?, seguirán con más de lo mismo.
Con respecto a nosotros mismos, no éramos ni muchos ni pocos, suficientes para el tipo de acto, pero algo es muy evidente, la franja de edad entre los 18 y los 30 años, no se implica en las “cosas de la política”, y siguen siendo la mayor incógnita ante los procesos electorales.
Pese a ello, creemos que hay un tema ante el cual no se mostraran impasibles, su libertad, su derecho a decidir y a ser sujetos activos de su propio futuro, pese a su desconfianza de la clase política.
El secreto para ganárselos, es simple, preocuparse de sus problemas, ofrecerles soluciones a los mismos y reconocer la gran importancia que tienen en el presente y futuro de nuestro país.
Pobre gente, si hay alguien sin futuro en este país, son precisamente ellos (1500 en Gasteiz no se indica el método de recuento).
Otros que no se caracterizan precisamente por su simpatía hacia los nacionalistas, valoran la presencia como significativa, aceptan las cifras de la policía municipal y muestran preocupación.
La manifestación y toda su fase previa, ha generado damnificados, quienes originan el problema estudiaran sus consecuencias, y.............. , ¿dictaran auto de procesamiento contra todos los presentes?, ¿continuaran con su desprestigio a nuestras instituciones?, ¿se disolverán?, seguirán con más de lo mismo.
Con respecto a nosotros mismos, no éramos ni muchos ni pocos, suficientes para el tipo de acto, pero algo es muy evidente, la franja de edad entre los 18 y los 30 años, no se implica en las “cosas de la política”, y siguen siendo la mayor incógnita ante los procesos electorales.
Pese a ello, creemos que hay un tema ante el cual no se mostraran impasibles, su libertad, su derecho a decidir y a ser sujetos activos de su propio futuro, pese a su desconfianza de la clase política.
El secreto para ganárselos, es simple, preocuparse de sus problemas, ofrecerles soluciones a los mismos y reconocer la gran importancia que tienen en el presente y futuro de nuestro país.
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